No voy.
Estoy .Acaricio cada día tu sombra inmóvil
que es lo más hermoso que me viene a la mano hoy.
No vivo,
doy,
y cato engaños llenos de prisas y risas
y monedas que no voy a morder
porque me comí el asco una vez.
No río.
No quiero.
Me quedo al final donde siempre,
al frente,
donde el respirar es cosa fácil y tranquila.
(Aún rompiéndose los cuernos con la barra)
Y crezco por ser oscura en el antro,
donde no esperar más de lo que hay
se convierte en filosofía,
donde los disfraces sobran y de paso te enfrían el gaznate.
Vengo.
Voy.
No estoy.
La enredadera de tu amor trepó a lo largo de mis piernas.
Subió y quiso ahogarme,
Constriñéndome el tórax.
Dejándome
respirar
a duras penas,
asfixiándome.
Dejándome pensando de una manera foránea,
y ni siquiera puedo porque me oprime tanto…
Joder,
estoy cansada de caerme,
de romperme cosas,
de romper la voz guillotinada,
de retorcer las entrañas a ritmo de platillo,
de parchear,
de rehabilitar.
Joder,
estoy cansada.
No lo ves porque te desangras entre arañazos,
riéndote como un tonto…
y el ciego…no pudo ver, ni saber del color rojo.
Camino por la arena y
joder,
mi cuerpo se hunde hasta el cuello,
pero salgo.
Consigo salir.
Y joder,
cómo cuesta caminar…
Es preferible que me dejes un poco en paz
(Si es que consigo encontrarla en este invierno
que pronto se vestirá con luz azul_claro).
Joder,
¿qué fue de los cuentos de hadas?
Hay muchos por escribir todavía…
Joder,
cómo me duele la cabeza
y cuánto…
cuánto sueño te tengo…
EVAITA!: BUENO DE VERDAD!!!
ResponderEliminarNunca dejes de escribir! ML