viernes, 29 de junio de 2012

SORDERA ESCOGIDA

Oír mi nombre en tu boca adquirió índole dramático cuando dijiste adiós, y las letras se rompieron en el suelo lleno de babas, y fue el último sonido que fui capaz de escuchar.  Creí delirar viendo a la gente moviendo sus labios,  cotorreando sin sonoridad… dejé de escuchar los coches, los maullidos de los gatos revolviendo en la basura de un contenedor sin tapa que nunca deja dormir, dejé de oír tus latidos, dejé de oír mi risa cuando subía al cielo…
Luego tampoco sonaban las risas de los niños, las olas del mar, las canciones bonitas de amor, las mariposas enmudecieron y me endurecieron…dejé de oír las conversaciones que tanto me aburrían, ya no oía el miedo, ni el dolor, ni escuchaba  el respeto por ningún lado, ya no oía retorciéndose al asco y la repulsa que a veces siento, simplemente dejé de oír…
No podía escuchar el viento, ni las tormentas, los truenos y el cielo ya no estremecían, ya no oía ni sol ni luna, no oía noche, no oía fresas, ni chocolate, no oía abrazos, ni cariño, la lluvia ya no cantaba, no podía oír tu pelo… se me hizo extraño  dejar de oír al habitante impávido que llevo dentro de este pellejo mortal… que tanto se manifiesta a veces,                                                                                                                                   entorpeciendo mis torpes andares, y quise dejar también de oírlo, dejé de oír las impertinencias tan fastidiosas e hirientes que hacen mella imborrable, dejé de oír la razón, la sinrazón, las disculpas tratadas con soberbia, ya no oía hipocresía, no oía la deleznable cobardía… fue grato ensordecer…
Silencio
… Llegué al mar y no oía  barcos, no oía el humo ni las rocas aliñadas con sal, ya no se oían llantos, ni partos, mis pies callaron y mi piel tampoco oía tus caricias así que ya todo dejó de contar… llegando a la conclusión de que no era yo quién no oía, fue el mundo quién dejó de hablar…


El teatro en playback continuaba…



8 comentarios:

  1. Lástima haber llegado tarde. Buen texto, enhorabuena.

    ResponderEliminar
  2. Nunca es tarde.
    Muchísimas gracias por escoger pasarte por aquí a leer, cierto es que tengo el blog un poco abandonado.
    Sueño con el día que mis musas vuelvan de sus vacaciones que ya las voy echando un poco en falta.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  3. Buen trabajo de prosa poética. Yo no me preocuparía por los estudios. Miguel H. carecía de ellos y ya sabes...Mas bien los grandes podríamos definirlos como un poco "trepas", además de su arte. Comparto tu afición a la lectura y Los Módulos, olvidados que crecí con ellos. Animo y p'alante.
    Eduardo A.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No pretendo ser un "anónimo" y me identifico como uno de Noreña que vive en Pola haz muchos años. Me ratifico en el mensaje anterior. Pasa en todas las artes.
      Saludos. Eduardo Arguelles

      Eliminar
    2. Bueno en este caso supe que eras tú, ya no eres un anónimo :) hay personas que no se identifican bien porque se les olvida o bien porque no quieren, en cualquiera de los casos les agradezco a todos su paso por aquí siempre.

      Eliminar
  4. Muchas gracias a los anónimos también. Lo de los estudios en arte o literatura, lo puse porque es tan cierto como que respiro, pero no me preocupa porque los grandes son Unos, yo pertenezco a los Otros :) a aquellos a los que símplemente saber que alguien pueda leerme y pueda gustarle o hacerle pensar o hacerle sentir...con eso...con eso me doy con un canto en los dientes. Muchas gracias y un abrazo.

    ResponderEliminar